Las consecuencias de la calima, las alergias y el asma en la conducción

Durante las últimas semanas, Gran Canaria ha sufrido episodios de intensa calima que han afectado al flujo de actividad normal de los isleños. Estas condiciones atmosféricas afectan la salud de muchas personas y pueden llegar a suponer algún riesgo durante la conducción, ya que, las alergias, el asma y las afecciones ocasionadas por la calima afectan al organismo y a la salud. Por ello, en Reconocimientos Médicos Escaleritas valoramos cada caso en particular teniendo en cuenta el historial de cada uno de los pacientes que atendemos para darles todas las recomendaciones oportunas para realizar una conducción segura.

Casi un 20% de la población en España tiene algún tipo de alergia, esto supone más de 8 millones de personas, una cifra que continua aumentando cada temporada. La Dirección General de Tráfico alerta que esto puede afectar a la conducción, ya que aumenta un 30% la posibilidad de sufrir un accidente de tráfico. Algunos de los síntomas son la congestión nasal, picores en la piel, estornudos fuertes, irritación de ojos, picor de garganta y problemas respiratorios, entre otros. Así, por ejemplo si estornudas durante más de cinco segundos seguidos, el conductor deja de prestar atención a la carretera y el riesgo de colisión o de accidente es muy alto.

Además, en contra de lo que se cree, la alergia no se da solo en primavera; hay muchos pólenes que aparecen en otras épocas del año. Y en concreto, Canarias es la comunidad con mayor prevalencia de alergias por ácaros. El clima cálido y húmedo que predomina en las islas, hace que la media de afectados sea de un 60%, superando en un 40% el porcentaje de afectados en el territorio peninsular. La cifra de asmáticos en el archipiélago también supera al del resto de España, siendo el 18% y el 6%, respectivamente.

La calima presenta partículas de dióxido de sílice y aluminio, además de arena, bacterias, hongos y pólenes, entre otros agentes contaminantes. Este es un fenómeno recurrente en Canarias y  agrava la sintomatología de las enfermedades, provocando dificultades en la respiración e irritación en la garganta y en los ojos. Reacciones que se pueden prolongar a lo largo del tiempo hasta que aparecen lluvias o desaparece totalmente la calima.